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Luego que ayer la senadora Isabel Allende calificara como chantaje las condiciones de su sobrina Maya Fernández para integrar la próxima directiva, la disidencia del Partido Socialista les pidió reflexionar.
En concreto, el sector crítico a la conducción del senador Álvaro Elizalde pidió que se margine de una próxima mesa directiva.
En ese sentido, el apoderado de mesa de Fernández, el diputado Marcelo Díaz, remarcó que la lista de continuidad tiene derecho a posicionar a un presidente, pero -a su juicio- no puede ser ninguno de los actuales dirigentes, ya que tienen buena parte de la responsabilidad en la crisis del partido.
Otros nombres no generan problemas. La opción de la senadora Isabel Allende, por ejemplo, no genera ruidos en la disidencia. Así lo planteó Fernando Atria.
Mañana, en tanto, en el pleno del comité central asistirán los nuevos 110 delegados, a cuya cita también pueden asistir los parlamentarios de la colectividad, aunque no tienen derecho a voto.
Durante la jornada probablemente será parte del diálogo la propuesta Carlos Montes y otras figuras del partido, que planteó la modificación estautaria para fomentar el debate de ideas, reformas el Tribunal Suprema y acciones legislativas para evitar el clientelismo.
Asimismo, plantean crear una comisión conformada por expresidentes del PS y otras figuras significativas que vele por la transparencia, probidad y acciones anticorrupción.
Parte de lo explicado por el senador Montes, quien cree que lo más seguro es que se resuelva la continuidad de Elizalde, y que lo que se debe analizar es el cambio en la manera de dirigir.
De concretarse la continuidad de Elizalde, la disidencia aseguró que evaluará en el momento medidas. Por ahora no piensan en renunciar al partido.
La información es de: biobiochile.cl
