China llama a una desescalada en Ucrania 

China llama a una desescalada en Ucrania 

Los socios chinos hacen continuos llamamientos a un alto al fuego pese a que repiten una y otra vez que consideran legítimas las preocupaciones de seguridad de Putin.

Un rabioso ejército ruso, frustrado por sus derrotas en el campo de batalla, bombardea ciudades ucranianas matando a muchos civiles. Misiles sobre Kiev, Zaporiyia o Dnipro tras el ataque al puente de Crimea. A casi 6.500 kilómetros de allí, desde Pekín, socios ideológicos reafirmados de Moscú, ven que una guerra que pensaron que duraría unas semanas, se sigue alargando. Mientras, desde el gigante asiático mandan algunas señales dejando entrever un pequeño distanciamiento con el Kremlin.

Este lunes, tras los últimos ataques de las tropas de Putin, desde China piden, siempre tirando de un mensaje donde hay que leer mucho entre líneas, una desescalada en la guerra de Ucrania. «Esperamos que la situación en Ucrania disminuya pronto», ha dicho Mao Ning, portavoz de Pekín en la rueda de prensa que celebra cada día el Ministerio de Exteriores chino. Donde sí ha puesto más énfasis la vocera es en responder que China «siempre ha sostenido que se debe respetar la soberanía y la integridad territorial de todos los países».

Mientras Rusia continúa encendiendo sus ánimos bélicos, sus socios chinos hacen continuos llamamientos a un alto al fuego pese a que repiten una y otra vez que consideran legítimas las preocupaciones de seguridad de Putin sobre la expansión de la OTAN hacia Europa del Este. Por ese equilibrio lleva caminando Pekín durante toda la guerra, aunque el respaldo tácito al Kremlin siempre ha tomado más fuerza dentro de casa.

Hay una corriente de expertos que interpretan algunas señales de distanciamiento de China después de la reunión el pasado 15 de septiembre en una cumbre en Uzbekistán entre el presidente Xi Jinping y Vladimir Putin. Al comienzo de las conversaciones, el ruso dijo que entendía que China tiene «preguntas y preocupaciones sobre sus acciones en Ucrania», lo que indicaba que Xi le había expresado su inquietud por la situación.

Un toque de atención que ha amplificado el discurso chino de respeto a la soberanía de Ucrania. «Debe respetarse la integridad territorial de todos los países», reiteró hace un par de semanas Zhang Jun, embajador chino en la ONU, tras el «referéndum» celebrado en Lugansk, Donetsk, Jersón y Zaporiyia para su incorporación a la Federación Rusa.

«La tarea en cuestión es presionar a las partes para que abran la puerta a un acuerdo político lo antes posible, para incluir las respectivas preocupaciones legítimas en las negociaciones y poner sobre la mesa todas las opciones viables. Los acontecimientos recientes nos recuerdan una vez más que la paz debe ser buscada y defendida por todos», continuó Zhang.

El pasado viernes, Rusia, como miembro permanente del Consejo de Seguridad de la ONU, ejerció su poder de veto a una condena de los aliados de Occidente por las anexiones de territorio ucraniano. En aquella votación, Moscú no encontró el apoyo de China, que se abstuvo, al igual que India. «China pide a todas las partes involucradas que ejerzan moderación, se abstengan de acciones que en realidad exacerben las tensiones y dejen espacio para una solución a través de negociaciones diplomáticas», soltó Zhang, que, en cambio, sí que fue de la mano con su homólogo ruso para bloquear los intentos del Consejo de fortalecer las sanciones contra Corea del Norte por sus últimos lanzamientos de misiles balísticos.

Fuente: elmundo.es