Senadores rechazan propuestas para explicitar qué pasa si gana el «En contra» a la nueva Constitución

La Comisión de Constitución entregó la negativa a todas las indicaciones de parlamentarios de oposición que buscaban incorporar una «norma de clausura». 

La Comisión de Constitución rechazó todas las indicaciones de senadores de oposición que buscaban incorporar una «norma de clausura» al nuevo proceso constituyente, es decir, una frase explícita que indique qué sucede si gana el Rechazo -o la opción En contra, como se ha establecido- en el plebiscito de salida del próximo año.

La instancia está debatiendo y votando modificaciones a la reforma constitucional que habilita el acuerdo constituyente desde las 9:30. Actualmente, esta reforma establece que si gana la opción A favor, seguirá el trámite para que se promulgue, publique y se jure o prometa por ese texto, pero no aparece qué pasa en caso de la opción contrario.

La propuesta para modificar esto era de los senadores Juan Castro Carmen Gloria Aravena, ambos independientes del comité RN, y del senador Rojo Edwards (Republicano).

Castro propuso que si el texto se rechaza, continúe vigente la actual Constitución, pero además establecía que «durante el plazo de 10 años siguientes al resultado del plebiscito no se podrán realizar nuevos procesos de elaboración que la reemplacen, sin perjuicio de la facultad constituyente derivada que permite las reformas a la Constitución vigente que se realizan mediante el ejercicio del Congreso Nacional, sobre el cual recaerá la responsabilidad de perfeccionar dicho texto».

Aravena, en tanto, ingresó una indicación que consagraba el mismo escenario en caso del triunfo del Rechazo pero agregaba que «sólo podrá renovarse la discusión de un proyecto de reforma constitucional que establezca el procedimiento de elaboración de una nueva Constitución por un quórum de dos tercios y en el plazo de cinco años desde la calificación del plebiscito ratificatorio».

En tanto, Edwards postulaba que «en el caso que la opción ‘Rechazo’ resultare ganadora se dejará sin efecto el proceso constitucional propuesto, la elección del Consejo Constitucional y seguirá rigiendo la actual Constitución».

Las tres fueron rechazadas por unanimidad por los senadores Matías Walker (Demócratas), Álvaro Elizalde (PS), Loreto Carvajal (PPD), Rodrigo Galilea (RN) y Luz Ebensperger (UDI).

Para justificar su voto, Walker se manifestó contrario a la propuesta de Edwards porque a su juicio no se debía borrar lo sucedido, dado que «la historia es lo que es, con sus aciertos y fracasos».

Sobre las demás propuestas, argumentó que en la discusión del proyecto constitucional «algunos partidos, por ejemplo Demócratas, éramos partidarios de establecer que si ganaba el rechazo quedara habilitado el Congreso para habilitar las normas de la nueva Constitución, pero se estimó que no era necesario, como tampoco que quedará vigente la actual Constitución. Y siempre el Congreso quedará habilitado por 4/7 para reformar».

La senadora Ebensperger, en tanto, remarcó que no se trataba de un proceso en «loop», como criticaron varios parlamentarios de oposición, y dijo que «no es un proceso circular, por lo que no requiere de estas indicaciones. Hemos sido cuidadosos en que este es un proceso único».

En tanto, Elizalde alegó que no existía tal «vacío» constitucional «porque mientras no exista una nueva Constitución se mantiene vigente la Constitución actual. No hay que insistir en normas que son de sentido común».

Asimismo, señaló que «al estar regulado este plazo con fechas específicas, este procedimiento se puede hacer solo una vez. Es una norma transitoria que se incorpora a un capítulo permanente de la Constitución pero tiene carácter transitorio y por eso se agota con su aplicación. La norma no podría seguir aplicándose sucesivamente».

Más tarde se abordó una indicación del senador Galilea que iba en el mismo tenor, pero fue retirada por él.

Con este rechazo, dichas normas no se incluirán en el borrador que se someta a votación en la sala del Senado la próxima semana, salvo que sus autores decidan reponerlas. Aun así, podrían reincorporarse en la tramitación de la Cámara de Diputadas y Diputados.