Desvelada una posible forma de evitar la metástasis del melanoma

Investigadores del CNIO descubren una molécula iniciadora de la metástasis del melanoma en humanos y demuestran que bloquearla en animales evita que el cáncer se extienda.

Investigadores del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO) han identificado a una molécula que orquesta la metástasis del melanoma en sus primeras fases. Inhabilitar o bloquear a esta molécula podría evitar la propagación del cáncer de piel a otros tejidos. También podría servir para identificar la metástasis en sus fases iniciales, momento en el que es más probable remediarla. Los hallazgos acaban de publicarse en Nature Cancer.

El hallazgo

Identificar a NGFR en ganglios cercanos al tumor ayudará a los médicos a detectar metástasis con tiempo de maniobra

Héctor Peinado, jefe del grupo de Microambiente y Metástasis del CNIO, lleva años investigando cómo se desatan las metástasis ‘distales’, desde el cáncer iniciador hacia otros órganos. Hace siete años se centró en aquellos cánceres que hacen una parada técnica antes de pasar a otro órgano y tejido, deteniéndose en el ganglio más cercano al tumor, o ganglio ‘centinela’. Hoy publica los resultados de estos años en Nature Cancer,  desvela un marcador de metástasis de melanoma, y una posible terapia antimetastásica.

En melanoma, cuando las células tumorales llegan al ganglio centinela, la metástasis no es letal. Sin embargo, «es capaz de iniciar un proceso al que podemos llegar demasiado tarde», explica el investigador.

«En el proceso de metástasis, las células tumorales liberan unas partículas que se llaman exosomas, que manipulan el microambiente tumoral y allanan el camino para la extensión del cáncer», explica Peinado. Él y su equipo han encontrado a al jefe de operaciones de estas partículas: la molécula NGFR. En palabras de Peinado, «esta molécula actúa como fertilizante de la metástasis», dirigiendo todo el proceso de iniciación metastásica en los ganglios distales.

Los investigadores también han probado su bloqueo en modelos animales y han descubierto que en animales puede reducir drásticamente las metástasis. «Hemos descubierto que si detectamos a la molécula NGFR en el ganglio centinela, el pronóstico del paciente es peor y sabemos que desarrollará una metástasis», explica Peinado. La buena noticia es que es una molécula que se da en procesos iniciales de metástasis, «en un momento en el que tenemos tiempo de actuar», añade el investigador, y que además, puede bloquearse.

Utilidad I: Identificar la agresividad metastásica del melanoma

Podrá estratificarse a los pacientes y conocer mejor su pronóstico

«El melanoma es un cáncer muy agresivo y metastásico» explica Peinado, «hasta la fecha no había marcadores pronósticos de metástasis temprana en ganglio para identificar a los pacientes con melanomas más agresivos o con capacidad metastásica», añade.

Con su hallazgo, Peinado y su equipo aportan a la comunidad médica un nuevo marcador o molécula para identificar en las muestras de pacientes con melanoma a aquellos que auguran un peor pronóstico, en momentos iniciales en los que puede cogerse la metástasis a tiempo. «Lo ideal ahora es incorporar pruebas de detección de NGFR en los servicios de anatomía patológica de los hospitales», comenta Peinado.

Utilidad II: Un blanco para evitar la metástasis

Bloqueando a NGFR podría frenarse a tiempo la progresión de la metástasis de melanoma

La molécula NGFR llega mediante exosomas a los ganglios centinelas hacen que estos se hagan cada vez más grandes, favoreciendo que las células metastásicas aniden y sobrevivan. Actúa como facilitadora y perpetuadora de la metástasis, aunque no solo.

NGFR Es una molécula que se ha estudiado en otros procesos, y su bloqueo se emplea en terapias contra otras enfermedades. Por ejemplo, se está probando un inhibidor de NGFR, el THX-B, para tratar retinopatías diabéticas y glaucomas, en fases preclínicas. El hecho de que ya haya un bloqueante de NGFR como THX-B desarrollado y usándose en otros ámbitos médicos acelera el proceso de aprobación para su uso.

Siguientes pasos

El desarrollo de una terapia antimetastásica con THX-B dependerá del interés de las farmacéuticas

«Junto con nuestros colegas de Canadá, con los que hemos hecho este estudio, hemos patentado el uso de THX-B para cáncer. Hemos demostrado que funciona como inhibidor de la metástasis temprana en animales, en ensayos preclínicos», explica Peinado.

Para pasar a la siguiente fase de ensayos clínicos y ver si es eficaz en humanos, una farmacéutica tendría que entrar en el juego y aceptar el proyecto para convertir estos hallazgos en una terapia útil. De manera importante “pensamos que THX-B podría ser usado en otros tipo de cánceres en los que NGFR juegue un papel para metastatizar en ganglio centinela”, concluye el investigador.

Fuente: lavanguardia.com